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Cómo funciona el lavavajillas: guía práctica

11 enero 2024

La llegada del lavavajillas a los hogares fue una oportunidad de ganar tiempo y comodidad. En el mercado existen una gran variedad de modelos, pero en lo que realmente difieren es más en la apariencia exterior.

En el siguiente artículo detallaremos partes del lavavajillas, cómo usar un lavavajillas, qué necesita un lavavajillas para funcionar, cómo instalar un lavavajillas y cómo funciona un lavavajillas por dentro, además de tips para mantenerlo limpio y activo.

Partes de un lavavajillas

Para saber cómo funciona un lavavajillas por dentro, describimos los componentes que lo convierten en uno de los mejores aliados de la cocina:

Para que la temperatura del agua sea la correcta al momento de lavar la vajilla, el artefacto cuenta con un calentador eléctrico que lo hace posible. Hay que tener en cuenta que, al estar en constante contacto con el agua, el calentador probablemente acumule cal y sea necesario limpiarlo.

El agua, ya con cierta temperatura, lava perfectamente la vajilla gracias a un motor o bomba que con fuerza drena en función del proceso de limpieza. Pero son los brazos rociadores, los que giran durante el proceso de lavado, llegando a cada rincón de la superficie de la vajilla.

El resultado del proceso de lavado será satisfactorio siempre y cuando se sepa cómo ordenar la vajilla en las bandejas. Las mismas están diseñadas para que cada vajilla tenga su espacio, de manera que, en el lavado, con los brazos rociadores, se logre una perfecta limpieza de todo lo colocado a lavar.

Por último, y no por eso menos importante sino todo lo contrario, está el filtro, que resulta tan imprescindible como todas las partes del lavavajillas.

En él se acumulan todos los restos de comida, resultantes del lavado eficiente, y suelen liberar un mal olor si no se quitan a tiempo. Se recomienda limpiarlo con cierta regularidad, ya que suelen ser uno de los principales motivos de reparación de un lavavajillas.

Funcionamiento del lavavajillas

Ya conociendo la función de las partes de un lavavajillas, es fundamental realizar un prelavado una vez que el artefacto está instalado. Ahora sí, vayamos a recorrer el funcionamiento del lavavajillas, en 7 sencillos pasos:

  1. El lavavajillas se llena con agua, que ingresa en su cavidad inferior.
  2. El agua se calienta a través de las resistencias del calentador, para lograr ablandar las suciedades y la grasa, y así lograr como resultado una limpieza profunda.
  3. El detergente, que puede ser gel, polvo o pastillas, ingresa de forma medida y automática al lavavajillas.
  4. Gracias a los brazos que giran, se produce un flujo de agua caliente que distribuye el detergente por la superficie de la vajilla, lavándolo a la perfección.
  5. Una vez que termina el proceso de lavado con el detergente, el lavavajillas vacía el agua con todos los restos.
  6. Luego, el artefacto ingresa más agua para realizar el enjuague, esta vez, sin uso de detergente, sino todo lo contrario, es agua limpia para dejar la vajilla casi lista.
  7. Por último, el agua utilizada del enjuague se vacía, y la vajilla que queda en el interior del artefacto culmina secándose con el calor que se genera dentro.

Para que el funcionamiento del lavavajillas resulte realmente eficiente, a continuación, te damos unos tips al momento de utilizarlo.

Organizar la vajilla

Es muy común que, al momento de disponer la vajilla y los utensilios en el artefacto, se haga de manera aleatoria, ubicando las cosas en donde haya un poco de lugar. Lo cierto es que, de esa manera, los brazos no pueden realizar su trabajo correctamente, imposibilitando la llegada del agua a todas las piezas colocadas.

Por otro lado, si al finalizar el proceso del primer lavado lavavajillas, no queda la vajilla como esperamos, es muy probable se repita el proceso. Eso implica gasto de agua, de detergente y de gasto eléctrico. Para que llegues a analizar cuánta energía consumes de un lavavajillas, recomendamos:

Los platos y fuentes se colocan en la parte de abajo del lavavajillas. Es en ese sector en donde el calor y el agua se sienten con más fuerza, por lo que, disponiéndolos en los divisores de la bandeja, mirando hacia el centro, se logra un lavado muy profundo.

En cuanto a las ollas y sartenes, también se ponen en la parte inferior. En este caso se debe atender que no sean los suficientemente grandes como para obstruir los brazos y se disponen boca abajo.

Las tazas y vasos se ubican en la parte superior y si es de forma inclinada mejor, y eso tiene un sentido. Toda la suciedad de los platos, muchas veces con gran contenido de grasa, se queda abajo, por ello no afectará a los vasos si se encuentran arriba. Por otro lado, al estar en la parte más alta, reciben mejor la presión del agua.

Respecto de los envases de vidrio y tuppers, también se colocan en la parte inferior, pero dada la temperatura del agua y el calor, previamente hay que asegurarse que sean materiales indicados para ese tipo de artefactos.

Por último, los cubiertos vienen con un lugar asignado, en una especie de canasta. En algunos modelos no está incluido, pero se puede conseguir aparte. Los cuchillos se colocarían mango hacia arriba para que, al retirarlos limpios, se eviten accidentes de corte o punzantes.

Hasta el momento, conocimos las partes de un lavavajillas, el funcionamiento del lavavajillas y cómo utilizar el lavavajillas.

Limpieza del lavavajillas

Por último, resulta importante saber cómo limpiar el lavavajillas para poder extender su vida útil y sacarle el máximo provecho al electrodoméstico.

Si bien el uso cotidiano del lavavajillas es sencillo, pueden surgir problemas en su funcionamiento por no tener en cuenta ciertos puntos.

Al ser un artefacto en constante contacto con el agua, la dureza de la misma puede provocar problemas en su desempeño. Para mejorar la vida útil del lavavajillas, es conveniente utilizar un descalcificador para evitar los excesos de cal del agua.

El detergente es otro punto clave, ya que si se utiliza uno que no es conveniente para la marca o para el uso que le damos, sus residuos pueden obstruir los conductos y la reparación va a ser el único camino viable.

Por último, muchos, le hacen un enjuague a la vajilla antes de ingresarlo en el artefacto, para alivianar la tarea, sobre todo si hay muchos residuos de alimentos. Esa también es una forma de cuidarlo.